Desde el comienzo de la pandemia, la transformación tecnológica hacia la digitalización se ha acelerado. La inteligencia artificial, los dispositivos interconectados, e incluso la realidad virtual han tomado un gran impulso este año. A medida que la digitalización industrial continúe siendo prioridad, la acumulación y el análisis de los datos en forma confiable y certera tendrá que ir mejorando y será necesario buscar la mejor manera de que estos datos puedan ser visualizados para generar mejores resultados.
Ahora el Internet de las Cosas permite a los dispositivos interactuar a través de sensores, generando datos en tiempo real. Las grandes empresas en los países desarrollados están aprendiendo a procesar esta gran cantidad de datos. Y están pasando de los gráficos en una pantalla al 3D.
Los gráficos son eficaces para mostrar datos en forma simplificada e incluso son amigables para los dispositivos móviles. La visualización es fundamental para entender la data obtenida por el Internet de las Cosas. Y ahora, con la realidad virtual, la realidad aumentada y la computación espacial, los datos pasarán a ser exhibidos en tres dimensiones.
Industrias, comercios y consumidores están empezando a usar la realidad extendida para visualizar y entender datos que llegan a través de los dispositivos digitales. Empresas como Magic Leap ya ofrecen auriculares con computación espacial que permite a las empresas visualizar sus datos. Combinando el internet de las cosas con la computación espacial, las empresas podrán llevar la visualización de datos y su análisis a un nuevo nivel y lograr así menores resultados.
En la industria, la transformación digital ya está cambiando el modo en que las empresas controlan lo que están haciendo, Se trata de usar la tecnología para crear una experiencia de servicio a partir de cada proceso de fabricación y cadena de suministro. La visualización de la realidad extendida producto de los datos aportados por el internet de las cosas permite experiencias como la asistencia remota. A través de los dispositivos de realidad aumentada los operarios pueden ahora aprender cómo manejar una máquina o arreglarla. Y actualmente hasta es posible para alguien con cierta especialización hacerse sus propios lentes E.D.I.T.H (los lentes de realidad aumentada de Peter Parker en el Hombre Araña Lejos de Casa. https://www.electromaker.io/project/view/edith-glasses).
La realidad extendida es más que sólo visualización. Los humanos somos fundamentalmente visuales, pero a veces es necesario utilizar otros sentidos. Y lo es también para poder entender mejor y reaccionar a los datos digitales. Con los auriculares y los anteojos digitales no es suficiente. Las cámaras no siempre son útiles, por ejemplo, para saber si una máquina está prendida. Para eso se están utilizando los sensores, que sí pueden detectar mejor cuando una máquina está funcionando. Los operadores equipados con aparatos inalámbricos de retroalimentación como relojes y guantes pueden ayudar a alimentar datos y responder a ellos. Estos dispositivos se conocen como dispositivos hápticos.
Pero los dispositivos digitales interconectados no solo estarán presentes en la industria. Una encuesta realizada en 2019 por la consultora IDC, especializada en la economía digital, estima que para 2025 habrá 41.000 millones de dispositivos digitales interconectados en el internet de las cosas, generando 79,4 zettabytes de datos.
Con el abaratamiento de las cámaras y el mayor ancho de banda, los hogares se convertirán en el próximo semillero de datos a partir del internet de las cosas (lavarropas, refrigeradores, aspiradoras). Toda esta cantidad de datos podría volverse abrumadora, especialmente como notificaciones automáticas a través de móviles y tablets.
Así como la realidad extendida está creando una nueva experiencia en las plantas industriales, pronto será así en los hogares. Por ahora los consumidores aún no entienden lo que es el internet de las cosas. Pero ya hay empresas enfocadas en este rubro, como por ejemplo Vodafone Smart Tech.
Según una investigación de ptc.com, el 86% de las industrias consultadas esperan tener pilotos de realidad aumentada para el próximo año. Las empresas están entendiendo que la realidad aumentada y el internet de las cosas pueden mejorar el rendimiento de los empleados en diseño, manufactura, marketing, ventas y otros servicios. Por tanto, están empezando a crear ecosistemas compatibles con la realidad aumentada.
El internet de las cosas junto a la computación espacial y el advenimiento del 5G, crearán pronto infinitas posibilidades para las empresas y también para los consumidores.