¿Estamos avanzando hacia un nuevo estadio en la interacción digital donde los humanos ya no serán necesarios en la conversación? ¿Qué sentido tiene participar en una red social si el diálogo es construido por bots?
Estas pertinentes preguntas se hace Andrew Hutchinson en Social Media Today, a propósito de los planes de Mark Zuckerberg con respecto al uso de la IA generativa en sus redes sociales (Facebook, Instagram, Threads y WhatsApp).
Según The Verge, “Zuckerberg ve un futuro donde mundos virtuales generados por IA son llenados con caracteres de IA que acompañan a gente real. El CEO de Meta dice que una nueva plataforma está apareciendo este año que permitirá a cada usuario crear su propio personaje de IA y utilizarlo en todas sus redes sociales. Y tal vez estos personajes digitales puedan también postear su propio contenido”.
De hecho, ya estamos viendo los primeros indicios de esto: el investigador de aplicaciones Alessandro Paluzzi descubrió este proceso de creación de personajes con IA en el código back-end de Instagram en octubre.
Con este proceso de creación podrías elegir el género y el estilo de conversación de tu personaje, así como determinar cuáles son sus intereses. Estarías creando un amigo imaginario que siempre estará presente y representándote dentro de las redes sociales de Meta.
Sin dudas, el proyecto es interesante pero ¿cuál es la finalidad? ¿Es más social interactuar con un bot que con una persona real? ¿Es saludable crear una personalidad de IA y desarrollar una relación artificial? ¿Es eso lo que quieren los usuarios?
Esta es una pregunta clave en los planes de desarrollo de la IA de Meta. El año pasado Zuckerberg presentó sus chatbots de IA que son dobles de celebridades norteamericanas (Snoop Dogg, Charlie D’Amelio, Tom Brady, Paris Hilton). La empresa esperaba armar revuelo con el anuncio, pero cuando chatear con un bot que suena como Kendall Jenner deja de ser una novedad ¿a quién le interesa entablar una relación con un bot en una red social?
Los chatbots pueden ser de mucha utilidad, especialmente para brindar información en atención al cliente o servicios al consumidor. Pero ¿qué tipo de conversación personal puede generar un chatbot?
No está claro por qué Zuckerberg cree que agrega valor implementando esta comunicación con bots de celebridades. A menos que se trate de que no le encuentra un uso valioso a las herramientas de IA generativa disponibles, dado que los chatbots no tienen un propósito real en las conversaciones entre personas que se da en las redes sociales. Los chatbots son útiles en las relaciones comerciales y profesionales, no en las relaciones personales.
Se puede argumentar que usar IA generativa para crear mejores publicaciones podría ser valioso, y tanto LinkedIn como X lo están experimentando. Pero surge el mismo problema: cuanto más empleamos robots para la interacción humana, esas interacciones se vuelven menos humanas y, por lo tanto, menos valiosas para los usuarios reales.
Ya hay muchas respuestas originadas por chatbots de IA en las publicaciones de X, las que en teoría los creadores también podrían responder con similares respuestas generadas por bots de IA.
¿Cuánto tiempo pasará hasta que estas conversaciones sean solo robots interactuando con otros robots? Lo que, por otra parte, disminuirá el valor de las redes sociales para cualquier cosa que no sea rastrear noticias, y eliminará el aspecto “social” por completo. En este sentido, las redes sociales se están moviendo más hacia convertirse en medios de difusión de información.
Y no se trata sólo de Meta. También TikTok está trabajando en una plataforma llamada Digital Avatars, que permitirá crear personajes simulados por IA, con movimiento, expresión facial y voz, para usarlos en anuncios publicitarios. Como ya hemos informado en este blog, esto ya se ha convertido en una industria en China, donde ByteDance facilita el uso de estos avatares para ayudar a las empresas a vender productos en transmisiones en vivo. Ahora ByteDance apunta a masificar esta tecnología de venta por streaming en occidente por medio de TikTok, a pesar de que los usuarios de occidente han mostrado hasta ahora poco interés por esta modalidad.
Es pertinente la pregunta que ya nos hemos hecho alguna vez. ¿Esto hará que aumente el consumo de redes sociales, o por el contrario provocará una saturación que llevará a que la gente vuelva a las relaciones analógicas?
¿La creación de estos personajes de IA trae algún beneficio a la sociedad? No lo sabemos aún, pero lo que sí parece claro es que todavía no existe un caso de uso impactante para la IA generativa aplicada a las redes sociales. La integración de chatbots es interesante en algunos aspectos, y las herramientas de creación visual también son prometedoras en distintos casos de uso. Pero parece que las aplicaciones sociales todavía están buscando dónde encajan estas herramientas y cuál es su función ideal.
Hutchinson termina diciendo que “tal vez, en un futuro mundo virtual, tener la capacidad de generar experiencias completamente nuevas sea valioso y cambie el juego de la comprensión y la capacidad de la IA. Pero no estoy seguro de que el estado actual de las redes sociales realmente necesite IA, por mucho que las plataformas quieran que así sea”.
